Desde hace algunos años mi obra se nutre principalmente del paisaje. La naturaleza y su intensa complejidad ejercen el efecto de un poderoso imán cada vez que me encuentro frente a una tela en blanco. La inmensidad de las aguas, la energía que transmiten los bosques, la forma y el color de la vegetación plasman en mi pintura, intentando alcanzar la belleza que todo esto nos ofrece. Esta atracción por la naturaleza me condujo lentamente desde la figuración a la abstracción, la vivencia de los colores y las formas se adueñaban más libremente de la obra. En mi pintura utilizo técnicas mixtas con acrílico y óleo, aunque este último es el que más me identifico para lograr colores y texturas, facilitando el uso de la espátula, que es una de mis aliadas favoritas.       

"Al volver de mi viaje a Perú, sentí una necesidad imperiosa de mantener viva aquella experiencia tan movilizante, de volcar en la tela los momentos que viví, en un intento de recrearlos a través de la pintura"